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¿Qué tratamiento se utiliza para la EPOC o enfermedad pulmonar obstructiva crónica?

El término EPOC es un acrónimo de enfermedad pulmonar obstructiva crónica. La EPOC es una condición relativamente frecuente que afecta principalmente a adultos de mediana edad o a personas mayores. Generalmente, se suele producir en aquellas personas que fuman o lo hicieron en el pasado. Al ser una patología crónica y condición irreversible, es necesario aplicar el tratamiento lo antes posible para evitar que la EPOC evolucione y afecte a la calidad de vida del paciente.

Cuáles son los síntomas de la EPOC

En general, los síntomas comienzan con molestias leves que se agravan de manera progresiva, este hecho explica que la evolución de la EPOC se produzca de manera silente para el paciente. Es por ello importante, dar a conocer los síntomas en especial en aquellas personas que presenten factores de riesgo (personas fumadoras, expuestas al tabaco o a los químicos, entre otros).

Los principales síntomas de la EPOC son los siguientes:

  • Aumento de la dificultad para respirar, especialmente cuando se practica un deporte de forma activa.
  • Aparición de una tos localizada en el pecho de forma persistente y con flema. Esto es importante, ya que algunas personas pueden descartar este síntoma al considerarlo simplemente como una tos de fumador.
  • Cansancio.

Sin tratamiento, los síntomas suelen empeorar progresivamente. Sin embargo, hay que tener cuidado con tratar de predecir o estimar esta evolución sin el asesoramiento de un médico. Es posible que, en determinados periodos, estos síntomas empeoren repentinamente, lo que se conoce como un brote o exacerbaciones.

Es recomendable consultar a un médico de cabecera si se tienen síntomas persistentes de EPOC, especialmente si se tienen más de 35 años y se fuma o hay un historial previo de uso del tabaco.

Cómo prevenir la EPOC y realizar el tratamiento

El pronóstico para la EPOC varía de persona a persona. Esta condición no se puede curar ni revertir, pero para muchas personas, el tratamiento puede ayudar a mantenerla bajo control para que no limite severamente sus actividades diarias. La EPOC puede continuar empeorando a pesar del tratamiento, lo que eventualmente tiene un impacto significativo en la calidad y esperanza de vida de los pacientes.

Por ello, es importante recalcar que la EPOC es una condición prevenible en gran parte. Se pueden reducir significativamente sus posibilidades de desarrollarla si se evita el tabaco. Existen tratamientos que ayudan a minimizar el impacto de la EPOC. Si bien el daño a los pulmones causado por la EPOC es permanente, el tratamiento puede ayudar a retrasar la progresión de la afección.

Los tratamientos consisten, básicamente, en lo siguiente:

  • Dejar de fumar: el tabaco o la exposición al mismo es uno de los principales factores de riesgo asociado a la EPOC.
  • Inhaladores y medicamentos, si el especialista médico lo recomienda para facilitar la respiración.
  • Actividad física diaria moderada. A mayor entrenamiento muscular, mayor capacidad de ejercicio.
  • Buen estado de nutrición: hay que intervenir tanto sobre la obesidad como sobre la desnutrición y perdida de masa muscular ya que estas implican menor tolerancia al ejercicio.
  • Vacunación antigripal anual y antineumocócica.
  • Rehabilitación respiratoria.
  • Adecuado control de los síntomas.
  • En los casos más extremos, puede plantearse la posibilidad de realizar una cirugía o un trasplante de pulmón, aunque esta es solo una opción marginal y en casos extremos.

 

Recuerda que:

 

  • La EPOC o enfermedad pulmonar obstructiva crónica se trata de una patología pulmonar crónica y prevenible.
  • Lo más importante tanto para prevenirla como para tratarla es dejar de fumar cuanto antes.
  • Hay que acudir al médico cuanto antes si los síntomas, que en principio pudieran parecer leves, perduran  en el tiempo.