Salud-laboral

Enfermedades profesionales y laborales en el sector salud: ¿Cómo prevenirlas?

Según la OMS, en el mundo hay más de 59 millones de personas que desarrollan su actividad profesional en el ámbito sanitario. Si se tiene en cuenta la población mundial, se podría decir que 1 de cada 10 habitantes trabajan en el sector de la salud. Como en cualquier trabajador, pueden aparecer enfermedades profesionales, muchas de ellas relacionadas con el cuidado de la salud. Esto se debe al riesgo de exposición a determinados agentes biológicos, las lesiones musculoesqueléticas producidas por la movilización de pacientes o el síndrome de burn-out por las tareas asistenciales en el ejercicio de su profesión.

¿Qué son las enfermedades profesionales?

Atendiendo al artículo 157 de la Ley General de la Seguridad Social, se entiende por enfermedad profesional “aquella que se ha desarrollado u ocasionado como consecuencia de la actividad profesional”. Dicha actividad puede ser desempeñada por cuenta propia (autónomos) o ajena.

Para que una patología sea reconocida como enfermedad profesional ha de cumplir, al menos, uno de los siguientes criterios:

  1. La enfermedad ha de estar incluida en el cuadro de enfermedades profesionales elaborado por el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales.
  2. En dicho cuadro, también se enumeran una serie de agentes, sustancias o elementos cuya exposición prolongada puede afectar a la salud de las personas. En caso de que se demuestre una relación causal entre estos agentes y la enfermedad, también se reconocería como enfermedad profesional.

 

Para favorecer su identificación, las enfermedades profesionales se clasifican en 6 grupos diferentes:

  1. Enfermedades ocasionadas por agentes químicos.
  2. Derivadas por agentes físicos.
  3. Originadas por agentes biológicos.
  4. Inhalación de sustancias no recogidas en los apartados anteriores.
  5. Patologías dermatológicas provocadas por la exposición a determinadas sustancias.
  6. Enfermedades como causa de agentes carcinogénicos.

 

Enfermedades laborales más comunes en el ámbito sociosanitario

En el ámbito sociosanitario, las enfermedades profesionales más habituales están relacionadas con el contacto directo con el paciente. Las más habituales son:

  1. Las enfermedades profesionales más comunes ligadas a peligros biológicos son el contagio de virus o bacterias. Por ejemplo, la hepatitis, el VIH/SIDA o SARS, actualmente la COVID-19.
  2. Las lesiones musculoesqueléticas son también habituales en el sector sociosanitario. Estas lesiones se producen como consecuencia de la movilización de pacientes con movilidad reducida. Dentro de este grupo de enfermedades profesionales se pueden incluir también las lesiones fruto de movimientos repetitivos.
  3. En lo que respecta a riesgos físicos, son frecuentes las enfermedades profesionales fruto de la exposición al ruido y a las radiaciones. Otro de los riesgos asociados son las caídas producidas por resbalones o tropezones.
  4. En cuanto a enfermedades profesionales derivadas de agentes químicos, en salud, son habituales aquellas relacionadas con la exposición a gases anestésicos, citotóxicos y desinfectantes entre otros.
  5. La dermatitis es una de las patologías también comunes. Suele estar producida por la exposición a detergentes o materiales como el látex.
  6. Los accidentes biológicos producidos por pinchazos o cortes o los accidentes producidos por contusiones también se pueden producir en el entorno laboral sanitario.
  7. En lo que respecta a los riesgos psicosociales, actualmente los profesionales sociosanitarios son especialmente susceptibles al síndrome del burnout. Tal es el impacto que la crisis sanitaria ha tenido en la salud mental de los profesionales sociosanitarios que recientemente la OMS ha incluido el síndrome de burnout en su Clasificación Internacional de Enfermedades. Otras enfermedades que se pueden destacar en este ámbito son las lesiones provocadas por situaciones de violencia, el estrés o la ansiedad.

 

Otras lesiones

Otro tipo de lesiones que pueden producirse en el ámbito sanitario son:

  • Los problemas visuales fruto del uso continuado de pantallas o dispositivos.
  • Las alteraciones de los ritmos biológicos derivadas de los trabajos a turnos y del trabajo nocturno.
  • Accidentes ocasionados por el contacto con fuentes eléctricas.
  • Otros: accidentes automovilísticos en los trayectos in itinere al ir o volver del trabajo, y de forma excepcional por riesgo de incendio o explosión o atrapamiento.

 

Prevención laboral de enfermedades en el ámbito sociosanitario

Para minimizar el impacto de las enfermedades profesionales y laborales, entidades como el Ministerio de Trabajo y Economía Social o el Servicio de Salud de La Rioja han elaborado una serie de medidas de prevención laboral. A grandes rasgos, las principales medidas preventivas en enfermedades profesionales son:

  1. Informar y formar de los riesgos asociados al puesto de trabajo a través de programas formativos continuados.
  2. Implantación de estructuras organizativas que permitan responder eficazmente a las necesidades y retos. Por ejemplo, en el caso del Grupo HLA, la pandemia ocasionó que el Área de Prevención de Riesgos Laborales centrara su actuación en cinco áreas:
    1. Medidas organizativas.
    2. Estudio de grupos de trabajadores vulnerables.
    3. Valoración y seguimiento de casos sospechosos y confirmados con el estudio de sus contactos estrechos.
    4. Adaptación de los centros de trabajo.
    5. Labores de formación, información y adaptación continuada según la situación de la pandemia y las recomendaciones dadas por el Ministerio de Sanidad y órganos competentes.
  3. Disponer de material homologado.
  4. Cumplimiento de normas y estándares que garanticen la calidad y la seguridad en las actividades profesionales. Por ejemplo, el Grupo HLA tiene como marco de actuación un Sistema para la Gestión de la Seguridad y Salud en el Trabajo (SGSST) basado en el estándar OHSAS 18001.
  5. Formación en el uso y mantenimiento adecuado de los equipos de protección (EPIS).
  6. Facilitar una red de comunicaciones que ayude a gestionar de manera eficaz cualquier accidente que se pueda ocasionar.
  7. Respetar los descansos establecidos durante la jornada laboral y disponer de áreas específicas para ello.
  8. Adecuada conservación y mantenimiento de las instalaciones. En el caso del Grupo HLA, destacan las recientes inversiones en el Centro Nervión (Área de Esterilización y área quirúrgica), Hospital HLA Jerez Puerta del Sur (Renovación de la Central de Esterilización, el área quirúrgica y la torre de Laparoscopía) u Hospital Universitario HLA Moncloa (Renovación de la Central de Esterilización).

 

Implicación personal

La prevención de enfermedades profesionales y laborales también conlleva la implicación de todo el personal a través de acciones como:

  1. Especial cuidado en el manipulado de muestras (sangre, fluidos, heridas) y objetos cortantes o punzantes (jeringuillas o bisturí).
  2. Adecuada higiene personal antes y después de utilizar los equipos de protección.
  3. Fomentar activamente la adherencia a las pautas de vacunación que ayudan a proteger a los profesionales sociosanitarios de infecciones como gripe, hepatitis o la COVID-19.
  4. Los profesionales sociosanitarios han de ser especialmente cuidadosos y estrictos con sus horas de descanso.
  5. Utilizar prendas adecuadas, especialmente calzado cómodo y específico para el ámbito sanitario.
  6. Fomentar el orden y la limpieza en el puesto de trabajo.
  7. Seguir adecuadamente las indicaciones en el manipulado y conservación de material de trabajo.
  8. Cumplir las recomendaciones en la movilización de personas o grandes mercancías.

 

Recuerda:

  • Las enfermedades profesionales son aquellas que se producen como consecuencia de ejercer la actividad profesional. Estas se pueden producir por agentes químicos, físicos, biológicos, inhalación o exposición a sustancias.
  • En el caso del ámbito sociosanitario, las enfermedades laborales más habituales son aquellas producidas por contagio de agentes biológicos, lesiones musculoesqueléticas, exposición a determinados agentes (radiación, ruido o gases) o el síndrome de burnout.
  • El Servicio de Prevención de Riesgos Laborales es fundamental para garantizar la seguridad y la salud de los trabajadores. En el ejercicio de sus tareas es importante disponer de evaluaciones de riesgos laborales actualizadas, formación e información de los riesgos en cada puesto y lugar de trabajo, de cómo prevenirlos y más allá de lo laboral mediante programas de promoción de la salud entre otros.