Sueño cambio hora

Día mundial del sueño, el momento óptimo para adelantarnos al cambio de hora

Hoy es 19 de marzo, día mundial del sueño. Un día en el que la sociedad española de sueño lanza un mensaje preventivo a la población: un sueño regular es clave para un futuro saludable. Hoy hablamos en el blog de la importancia de adaptarnos nuestros horarios antes de que se produzca el cambio de horario.

28 de marzo, cambio al horario de verano

Para ejercitarlo en condiciones y prevenir problemas, hay que tener en cuenta que mañana es primavera y en menos de 10 días cambia la hora (28 de marzo). ¿Qué mejor momento pues, para corregir hábitos y poner nuestro organismo en hora?

El cambio de horario que se produce a finales de mes aprovechando que los días son más largos conlleva quitarle una hora a la noche para dárselo al día y esto implica ciertos cambios en el organismo. En primer lugar, va a estar expuesto a más horas de luz y eso determina el ritmo circadiano del organismo. El que a las 20.00 o 21.00 horas sea de día hace que se retrase la hora de dormir sin variar la hora de levantarse (salvo en periodos vacacionales).

El sueño es el taller de reparación del cuerpo, el momento en el que todo el sistema cardiovascular, el musculoesquelético, el metabólico, el inmune y las funciones cognitivas vuelven a un estado óptimo. Y hay que tener en cuenta que la alteración de la calidad del sueño aumenta el riesgo de sufrir enfermedades metabólicas cardio y cerebrovasculares, alteraciones inmunológicas o alteraciones del estado de ánimo, entre otras.

El primer paso es sincronizar el reloj biológico con el entorno y esto pasa por adaptar las conductas y estados corporales con los cambios del entorno.

Recomendaciones para ponernos en hora

  • Mantener unos horarios fijos de sueño y de comidas, intentando que la diferencia entre semana y fin de semana sea la mínima posible.
  • La exposición a la luz debe ser máxima por la mañana e ir reduciéndose poco a poco durante el día, llegando a ser mínima cerca de la hora de ir a dormir.
  • Esta exposición a la luz también debe regularse con el uso de móviles, tables y ordenadores que siguen comunicando luz al cerebro y por tanto afecta a la segregación de la hormona del sueño: la melatonina.
  • Con este cambio horario hay una tendencia a estar más tiempo de ocio aprovechando la luz natural. Es importante que ello no afecte al número de horas de descanso ya que el cuerpo no entiende de temporadas y necesita dormir entre 7 y 9 horas.
  • Diferenciar de la forma más marcada posible las horas de actividad de las horas de descanso. Una buena forma es hacer uso del ejercicio físico y del apoyo social, además del trabajo.
  • La alteración de los ritmos biológicos puede causar enfermedades metabólicas y obesidad ya que el reloj biológico de nuestro hipotálamo regula la expresión y actividad de enzimas y hormonas implicadas en la regulación del metabolismo

El tiempo que tarda una persona en adaptarse a los cambios de horario varía entre tres y siete días, aunque hay personas que les afecta de forma más prolongada. Por ello, es importante adelantarse a los acontecimientos y poner en hora el organismo.

De esta manera se puede ayudar al cuerpo a ese ajuste o, por el contrario, entorpecer el proceso de adaptación.

Recuerda:

  • El próximo 28 de marzo se realiza el cambio horario, un momento fundamental para corregir hábitos y poner nuestro organismo en hora.
  • El cambio de horario conlleva quitarle una hora a la noche para dárselo al día y esto implica ciertos cambios en el organismo.
  • El primer paso es sincronizar el reloj biológico con el entorno y esto pasa por adaptar las conductas y estados corporales con los cambios del entorno.