¿Cuáles son los principales tratamientos para la obesidad?
La Organización Mundial de la Salud estima que la obesidad se ha triplicado en los últimos 45 años. La “globesidad mundial” ha alcanzado un punto de inflexión histórico, en el que por primera vez hay más población mundial con exceso de peso que con bajo peso por falta de alimentos.
En España se estima que más de la mitad de los españoles tienen sobrepeso y que el 17% de la población padece obesidad. Hablamos de obesidad cuando la grasa se acumula de forma excesiva o anormal en el organismo, siendo perjudicial para la salud.
Obesidad, un problema de salud prioritario
Además de su alta prevalencia, la obesidad se asocia directamente a enfermedades graves (diabetes tipo 2, hipertensión, apnea del sueño, etc.), y es un potente factor de riesgo para el desarrollo de otras enfermedades, como las patologías cardiovasculares, al menos 16 tipos de cáncer e incluso la actual covid-19, que afecta con mayor gravedad conforme más alto es el índice de masa corporal.
Tratamientos para la obesidad
Obesidad y sobrepeso no son sinónimos
La principal forma de distinguir entre obesidad y sobrepeso es a través del Índice de Masa Corporal (IMC). Si al dividir el peso de una persona (en kilogramos) entre la altura (en metros) al cuadrado obtenemos una cifra igual o superior a 30, se considera que la persona tiene obesidad. En cambio, si la cifra se encuentra entre 25 a 30, entonces hablamos de sobrepeso.
Tratamientos para la obesidad
Los tratamientos para la obesidad se fundamentan en 4 pilares básicos:
- Una alimentación sana y equilibrada.
- Realización de ejercicio físico.
- Abordaje psicológico.
- Tratamientos médicos
Cambios en la alimentación
Una dieta equilibrada, variada y sana es fundamental para la prevención y el abordaje de la obesidad. La constancia, evitar dietas milagrosas que afirman ofrecer resultados prometedores en poco tiempo y, sobre todo, ponerse en manos de profesionales, son la clave.
No existe una dieta única y perfecta, sino aquella adaptada a cada persona. Acciones como reducir el tamaño de las raciones, evitar el picoteo, limitar productos procesados o reemplazos alimentarios son algunos de los principales consejos de los especialistas.
Ejercicio
Caminar o ir en bici son ejercicios de tipo aeróbico que nos permitirán quemar calorías con la consiguiente pérdida de exceso de peso. Se estima que, para conseguir un descenso de peso adecuado, es necesario realizar una media de 300 minutos de ejercicio físico a la semana de forma moderada.
Al igual que ocurre con la alimentación, es muy importante si sufrimos sobrepeso acudir a un especialista que nos permita fijarnos unos objetivos coherentes y adaptados a nosotros mismos, tanto a corto como a medio plazo. De este modo evitamos frustrarnos con el ejercicio y prevenimos lesiones.
Abordaje psicológico
Se sabe que en ocasiones el sobrepeso o la obesidad pueden estar relacionados con problemas psicológicos importantes como trastornos del estado de ánimo, de la conducta, estrés, ansiedad, distorsión de la imagen corporal o consumo de tóxicos (alcohol, drogas).
Técnicas como la terapia cognitivo-conductual o los grupos de apoyo, pueden ayudarnos a detectar, prevenir y tratar de manera adecuada aspectos psicológicos que pueden estar alterando nuestro equilibrio emocional y favoreciendo la obesidad.
Tratamiento médico conservador
El tratamiento médico inicial de la obesidad se denomina “conservador”, ya que utiliza la llamada terapia cuádruple compuesta por la acción de nutricionista, preparador físico, psicólogo y fármacos con seguimiento médico.
Cuando los tratamientos médicos conservadores fracasan de manera repetida, habitualmente porque el paciente pierde peso pero no consigue mantener la pérdida, se recurre a los tratamientos médicos “invasivos” (técnicas endoscópicas y cirugía bariátrica).
Tanto el tratamiento conservador como las técnicas invasivas, requieren de un compromiso y esfuerzo por parte del paciente para el mantenimiento de peso a largo plazo.
Los tratamientos médicos conservadores son los más utilizados en sobrepeso y obesidad leve (IMC entre 27 y 33).
Es muy importante señalar, antes de nada, que cualquier tratamiento ha de estar valorado y/o prescrito por un médico. Los fármacos, en cualquier caso, no son sustitutivos sino complementarios de las opciones anteriormente mencionadas: alimentación, ejercicio físico y abordaje psicológico.
El principal mecanismo de acción de estos tratamientos consiste en disminuir el apetito, es decir, proporcionar al paciente una sensación de saciedad precoz o alterar la absorción de nutrientes por parte del organismo. Aunque son fármacos fáciles de administrar (pueden ser administrados vía oral y algunos mediante inyecciones subcutáneas) es necesario que estén supervisados siempre por un profesional médico.
Tratamientos médicos invasivos
Existen una serie de técnicas invasivas que pueden ser utilizadas en estos casos, en función del peso del paciente (su IMC) y si padece enfermedades asociadas y en qué grado.
Los tratamientos médicos invasivos pueden realizarse por vía endoscópica o quirúrgica.
- Los tratamientos endoscópicos (balón gástrico, endomanga) se realizan en pacientes con IMC a partir de 27 y es recomendable no utilizarlos en IMC>33, dado que se multiplican los casos de pérdida insuficiente o recuperación de peso. Por supuesto, estas técnicas requieren de soporte nutricional y psicológico, recomendaciones de ejercicio y manejo por profesionales bariátricos expertos.
- Los tratamientos quirúrgicos, conforme a los protocolos vigentes actuales, pueden realizarse en pacientes con IMC>30 en los que se prevea una mejora de marcadores cardiovasculares o resolución de enfermedades, como por ejemplo la diabetes mellitus tipo 2.
Técnicas empleadas en HLA para tratar la obesidad
El Grupo HLA es uno de los líderes españoles en cirugía de la obesidad, tanto en número de pacientes intervenidos al año, como en la complejidad de los casos y el uso de la cirugía robótica.
La manga gástrica y el bypass gástrico son dos de las mejores técnicas que se utilizan actualmente para tratar la obesidad. La manga gástrica consiste en reducir el estómago a un 15% de su capacidad, mientras que el bypass reduce el estómago a un 10% de su capacidad anterior y además “salta” un tercio de la longitud del intestino.
Ambas técnicas se realizan por cinco pequeñas incisiones de 5-10 mm, bajo anestesia general, y el paciente puede ser dado de alta a las 24 o 48 horas. El paciente disminuirá su apetito, perdiendo el 70-80% del exceso de peso en los primeros 9 meses.
Durante el 24º Congreso Mundial de Cirugía de la Obesidad de 2019 (último presencial realizado), el grupo de cirujanos bariátricos Drs. Escartí, Bordallo y Torres, de los Hospitales HLA Universitario Moncloa (Madrid), HLA La Vega (Murcia), HLA Vistahermosa (Alicante) y HLA San Carlos (Denia), presentaron una importante serie de 911 casos operados y seguidos meticulosamente durante 7 años (PO-684), en la que se evidenció que el bypass gástrico es la mejor técnica quirúrgica, pues los pacientes mantienen a 7 años un 63% del sobrepeso perdido.
Cirugía de la obesidad con Da Vinci
El futuro de la cirugía de la obesidad es ya el presente en el Grupo HLA. Los hospitales HLA Universitario Moncloa (Madrid) y HLA El Ángel (Málaga) utilizan el robot Da Vinci XI para estas intervenciones.
Ventajas de la cirugía robótica
Entre otras ventajas, la cirugía robótica para tratar la obesidad permite:
- A través de pequeñas incisiones, introducir unos instrumentos que permiten un alto grado de control del movimiento que no puede alcanzar la mano humana.
- Visión en 3 dimensiones y poder mover los instrumentos en todas las dimensiones del espacio, lo que hace que la cirugía sea mucho más precisa.
- El cirujano bariátrico experto maneja desde una consola los instrumentos del robot Da Vinci, lo que mejora la seguridad de la cirugía.
- Disminuyen las molestias de los pacientes.
- Acorta la estancia hospitalaria.
Recuerda
- El 17% de la población sufre obesidad.
- La obesidad es cuando nuestro Índice de Masa Corporal es igual o superior a 30.
- Una alimentación saludable, ejercicio físico, tratamiento médico, apoyo psicológico o tratamientos farmacológicos son sus principales opciones terapéuticas en la obesidad.
- En casos más extremos, es posible recurrir a la cirugía.