¿Se pueden eliminar las varices?

Las varices son una afección venosa común que afecta especialmente a mujeres mayores de 40 años. Se producen cuando las válvulas de las venas no funcionan correctamente, dificultando el retorno de la sangre al corazón y provocando su acumulación en las extremidades. Esto da lugar a venas dilatadas, visibles y, en muchos casos, dolorosas.

Más allá del impacto estético, las varices pueden convertirse en un problema de salud si no se tratan a tiempo. Tanto es así, que pueden desencadenar complicaciones como trombosis o úlceras varicosas.

Qué son las varices y por qué aparecen

Las varices se caracterizan por la dilatación anormal de las venas, que se vuelven visibles bajo la piel y pueden acompañarse de síntomas como pesadez, hinchazón, calambres o dolor. Su aparición puede estar influida por múltiples factores de riesgo:

  • Predisposición genética: las personas con antecedentes familiares de varices tienen mayor debilidad en las paredes venosas y en las válvulas que regulan el flujo sanguíneo, lo que facilita su dilatación.
  • Embarazo y cambios hormonales: el aumento de hormonas como la progesterona relaja las paredes venosas. Al mismo tiempo, el crecimiento del útero ejerce presión sobre las venas de la pelvis, dificultando el retorno de la sangre.
  • Sedentarismo o largas jornadas de pie: permanecer mucho tiempo sin mover las piernas, ya sea sentado o de pie, reduce la acción de la “bomba muscular” de la pantorrilla. Esto favorece la acumulación de sangre en las venas.
  • Obesidad y sobrepeso: el exceso de peso ejerce presión adicional sobre el sistema venoso de las piernas, dificultando el retorno sanguíneo.
  • Envejecimiento del sistema venoso: con la edad, las paredes y válvulas de las venas se debilitan, y pierden su eficacia para mantener el flujo unidireccional de la sangre.

 

Es fundamental identificar y tratar las varices en sus fases iniciales. El diagnóstico precoz es posible mediante técnicas como el ecodoppler, que permite evaluar con precisión el estado de las venas y definir el tratamiento más adecuado para cada caso.

Tratamientos actuales para eliminar las varices

Gracias a los avances médicos, hoy es posible eliminar las varices sin necesidad de cirugía invasiva. Entre los tratamientos disponibles más comunes están:

  • Escleroterapia: consiste en la inyección de una sustancia dentro de una vena afectada, provocando su colapso y posterior reabsorción.
  • Fleboesclerosis con microespuma: se emplea una espuma para tratar varices de mayor tamaño. Esta técnica permite eliminar cualquier tipo de variz en sesiones de 20 minutos, sin ingreso hospitalario ni interrupción en la rutina del paciente.
  • Láser endovenoso: se trata de un tipo de láser que cierra las venas afectadas desde el interior.
  • Cirugía convencional o fleboextracción: consiste en extraer la vena afectada por varices mediante pequeñas incisiones en la piel. Está indicada solo en casos muy avanzados.

 

El éxito de estos tratamientos radica en la personalización. Así, cada paciente debe recibir una evaluación individualizada que permite seleccionar la mejor opción terapéutica. Contar con una evaluación médica especializada desde las primeras fases es clave para preservar la salud venosa y prevenir complicaciones futuras.

Recuerda:

  • Las varices afectan especialmente a mujeres mayores de 40 años y pueden derivar en complicaciones como trombosis o úlceras si no se tratan a tiempo.
  • Se caracterizan por la dilatación anormal de las venas, que se vuelven visibles bajo la piel y pueden acompañarse de síntomas como pesadez, hinchazón, calambres o dolor.
  • Gracias a los avances médicos, hoy es posible eliminar las varices sin necesidad de cirugía invasiva.